Diversidad sexual en el trabajo
Es imposible negar que vivimos en una sociedad con un sinfín de rostros y colores.
Aunque parezca increíble, estamos a un par de meses de finalizar el 2019, lo que significa que estamos a un paso de iniciar toda una nueva década.
Los más ansiosos ya se preguntan qué nos deparará esta generación de avances tecnológicos a la orden del día y actualizaciones diarias como si fuese cuestión de vida o muerte. Hemos atravesado por tantos acontecimientos en estos últimos 9 años que es difícil pensar en una sola cosa significativa, pero vale la pena mencionar, enfocándonos en el aspecto laboral, hechos como que la mujer cada día gana más reconocimiento en su posición de igualdad con el hombre, y que cada día son más los ambientes laborales donde se percibe una verdadera solidaridad y respeto por las preferencias sexuales de cada integrante del grupo.
‘Diversidad’ es una palabra que engloba un significado bastante amplio, y no estaría nada mal para postularla como una de las palabras más usadas en esta última década. Diversidad incluye factores como raza, genero, edad, color, nacionalidad de origen… pero también podemos agregarle religión, etnia, orientación sexual, educación, lenguaje, estatus económico, en fin, engloba muchas cosas, y aunque sorprenda, diversidad nada tiene que hacer con leyes, sino que ha crecido en el medio académico y social.
Es muy fácil vivir de estereotipos, estamos rodeados de ellos, es más, nos persiguen, a donde quiera que volteemos nos encontraremos con un estereotipo de alguna cosa. ¿El problema de esto? que hace que nos acostumbremos a un tipo de persona y pensamiento cuando realmente ningún ser humano tiene una única forma de ser, comportarse y mucho menos, pensar.
En la actualidad, los departamentos de recursos humanos de cada compañía están enfocándose en personalizar espacios y darles un “estilo” a lo que antes era un monótono blanco y negro entre escritorios y archivos metálicos; y así como existe este cambio en el diseño de muebles e interiores, se busca generar un cambio en la aceptación de cada miembro del equipo de trabajo sin importar las preferencias personales de cada uno.
Estudios han demostrado que este cambio de perspectiva genera una variedad de provechosos beneficios para las empresas que quieren adaptarse a los tiempos que corren: mayor variedad en el encuentro de talentos, amplitud en las perspectivas al generar ideas, mejores colaboraciones, aumento de la moral laboral así como de las oportunidades, mayor comodidad para los clientes y un incremento de la reputación de tu empresa. ¡Es una ganancia en todas las formas que lo veas!.
