Espacios monocromáticos se apoderan de la oficina

La moda de los 90 se abre paso en el 2020 pisando fuerte.

Aunque en el pasado los espacios monocromáticos eran sinónimo de combinar grises, blancos, negros y marrones, las tendencias actuales apuntan más a colores brillantes, como los colores primarios, esto es algo que en un principio puede parecer muy radical, y se debe considerar con cuidado la selección de colores. Por ejemplo, una sala de recepción decorada en amarillo, a primera instancia, puede ser demasiado incómoda para aquellos que lleguen y tengan que sentarse a esperar rodeados de un color tan intenso.

Pensar en el color ideal para cada espacio de acuerdo a su función es la clave para lograr armonía y sacarle todo el provecho al lugar donde se quiere aplicar el cambio.

Se puede comenzar por el área de la cocina o una zona de descanso, o incluso el baño, donde es más fácil utilizar la temática monocromática sin causar demasiado impacto. Lo más recomendable en estas áreas es usar tonos claros, que puedan generar la sensación de privacidad y descanso. En el caso de oficinas el azul es el color más recomendable, siendo su capacidad de generar calma una de sus mejores características, y para espacios de conferencias se puede utilizar el rojo, que transmite energía y promueve la participación.

Lo más importante con el tema de la decoración de espacios de trabajo personalizados es comprender que el mundo actual necesita de sitios que promuevan la creatividad y la productividad de los empleados.