Hoteles en la nueva normalidad

Los sitios con gran afluencia de personas deberán asumir el cambio

Como era de imaginarse, si las oficinas de trabajo, los restaurantes, cafés, y otros sitios de reunión social y gran aglomeración de personas, han tenido que adaptarse a las medidas de salud y seguridad para mantener una convivencia sana y que propicie el bienestar, los hoteles no podían evitar unirse al cambio.

Así como en el caso de las escuelas, los hoteles deberán asumir una profunda reestructuración de sus espacios, además que deben observar con atención el poder ofrecer las más altas garantías de higiene y seguridad en las habitaciones y zonas comunes, en vista de la gran diversidad de personas que acostumbran a transitar estos lugares de descanso y relajación.

Algunas de las medidas que se recomiendan establecer son: señalar circulaciones para evitar el cruce de personas, reducir la decoración al máximo, utilizar materiales antibacterianos y de fácil limpieza, contar con mobiliario versátil que permita variar fácilmente la configuración del espacio, o garantizar una adecuada ventilación y circulación del aire, estos aspectos son prioritarios a la hora de crear espacios seguros.

Aunque puede parecer una situación complicada, lo más positivo en esta situación es que los hoteles no tendrán que verse sometidos a un cierre de actividades debido a las circunstancias actuales, sino que, asumiendo las medidas de seguridad no tendrán que renunciar a su función original gracias a los cambios estructurales y de mobiliario que pueden realizar, permitiendo atender a sus clientes y visitantes de forma segura, con la misma calidez y dedicación de siempre.